En Madrid no hay muchas posibilidades para nadar y también estar en la misma ciudad todo el tiempo es un poco aburrido. Por esta razón hemos viajado a Valencia este sábado.
Viajamos con iryo, un proveedor de trenes de alta velocidad de Italia, sus trenes tienen casi 300 km/h. Llegamos a uno menos cuarto en Valencia y después vamos a la playa con bicicletas que hemos alquilado. Además visitamos un zoo de animales del mar y la catedral de Valencia.
A las doce de la noche venimos en Madrid.